A una altitud de alrededor de 800 metros sobre el nivel del mar, el clima es agradable y las vistas son espectaculares. A lo lejos se puede disfrutar de las olas blancas rompiendo en la Playa Carrillo. Las montañas de la Península de Nicoya son un gran lugar para establecerse y vivir un estilo de vida basado en la tierra.
La propiedad es ideal para esto ya que está plantada con varias verduras y frutas diferentes. Todos han sido tratados orgánicamente para que el agua y el suelo estén libres de químicos. Entre las frutas y verduras, encontramos maíz, frijoles, cilantro, naranjas, plátanos, mangos, manzana de agua y más.
Además, hay más de 50 pinos que podrían usarse para construir varias cabañas en las diferentes terrazas. Hay tres terrazas o planteles de las cuales 2 se utilizan para la agricultura y la más grande está lista para desarrollarse.
Hay agua y electricidad públicas disponibles, así como un manantial natural que tiene agua alrededor de 9 meses al año.
Hermosas playas como San Miguel o Playa Coyote están a unos 45 minutos en coche. La ciudad más cercana está a unos 15 minutos en coche y ofrece todo lo necesario, como clínicas, bancos y diferentes mercados.